lunes, 16 de febrero de 2009

Hombres que sufren eyaculación precoz... culpar a sus genes

Los niveles de serotonina regulan la rapidez de la eyaculación

• Los hombres que sufren de eyaculación precoz pueden culpar a sus hormonas, según una investigación llevada a cabo en Holanda.
Los científicos encontraron que aquéllos que llegaban al clímax demasiado pronto durante el coito tenían una versión distinta del gen que controla la hormona serotonina, cuyos niveles regulan la rapidez de la eyaculación.
Se considera eyaculación precoz cuando el individuo llega al orgasmo y eyacula hasta 60 segundos después de iniciado el coito y posteriormente se siente avergonzado y afligido, según la sociedad Internacional de Medicina Sexual. Se llama eyaculación prematura primaria cuando sufren este trastorno desde su primer contacto sexual.
"Nuestros resultados contradicen la idea, que ha sido el conocimiento común durante años, de que la forma primaria de eyaculación prematura es un trastorno psicológico", afirma Marcel Waldinger, director del estudio.
Los hombres que sufren el trastorno por lo general se someten a tratamientos de psicoterapia y el uso de antidepresivos, que no son recetados para la depresión sino por uno de los efectos secundarios de estos fármacos que es el retraso de la eyaculación.
Aunque estos resultados confirman que la eyaculación precoz no es un trastorno puramente psicológico, quizás sí existe un elemento psicológico en éste, y la forma de comprobarlo es saber cuánto control tiene el hombre en su eyaculación cuando está solo.
Si el problema sólo ocurre con su pareja, entonces es probable que se trate de una afección psicológica, afirman los expertos.
Fuente: www.20minutos.es

jueves, 8 de enero de 2009

La pildora del AMOR

Moléculas como la oxitocina pueden incrementar la inclinación a enamorarse. Los investigadores trabajan para comprender cómo funciona y poder crear un fármaco
Una píldora capaz de desencadenar el enamoramiento de la persona deseada sería el sueño de la industria farmacéutica. Las ventas alcanzarían cifras descomunales, mayores, probablemente, que las de un compuesto contra cualquier enfermedad. Por el momento, esa poción del amor no puede encontrarse en las farmacias, pero hay quien piensa que llegará pronto. Larry Young, investigador del Centro Nacional de Investigación de Primates Yerkes de la Universidad de Emory, en Atlanta, plantea esa posibilidad en la edición de hoy de la revista Nature. “En la actualidad, los investigadores están intentando aislar e identificar los componentes neurales y genéticos de esta aparentemente exclusiva emoción humana. De hecho, es posible que pronto los biólogos sean capaces de reducir a una cadena de sucesos bioquímicos ciertos estados mentales relacionados con el amor”, escribe Young.
El científico estadounidense basa su hipótesis en los exitosos resultados de experimentos con animales dedicados a conocer los mecanismos que regulan emociones como el amor. En estos ensayos, el elemento estrella es la oxitocina. Esta hormona, segregada de forma natural por el hipotálamo, ha mostrado su capacidad para crear fuertes vínculos entre animales y mejorar la confianza en las relaciones entre humanos.
La hormona de la monogamia
En el caso animal, el ejemplo clásico de los efectos de la oxitocina se encuentra en los ratones de pradera. Estos animales se encuentran entre los escasos mamíferos inclinados a formar parejas monógamas de larga duración. Los estudios han comprobado que unos elevados niveles de oxitocina están relacionados con una mayor fidelidad a la pareja. Los roedores monógamos, sin embargo, comenzaron a serlo menos cuando se redujo de forma artificial la presencia de la hormona en su organismo.
"Todo es químico y eléctrico; podemos llegar a dudar que exista libre albedrío"
En su artículo, Young afirma que existe “un solapamiento intrigante entre las áreas del cerebro involucradas en el establecimiento de los vínculos de pareja en los ratones de pradera y aquellas asociadas al amor en humanos”. En su opinión, gracias a los modelos animales se está empezando a deconstruir el fenómeno amoroso y la posibilidad de que un “pretendiente sin escrúpulos pueda deslizar una poción amorosa farmacéutica en nuestra bebida” no está lejos.
Alberto Fernández Liria, presidente de la Asociación Española de Neuropsiquiatría, no cree que sea tan fácil saltar de ratones a humanos. “Cuando se sacan conclusiones muy espectaculares de este tipo de observaciones en otras especies se está simplificando y se están leyendo los resultados desde un punto de vista antropocéntrico”, afirma. “Una vez que tienes la cultura, el funcionamiento del organismo se vuelve mucho más complejo”, añade. Sobre el posible uso de la oxitocina como componente de una píldora del amor, Fernández Liria recuerda que, pese a lo observado en animales, en humanos sanos “no se han comprobado con estudios científicos este tipo de efectos” y cree que, como sucede con otras drogas, su uso podría provocar problemas. No obstante, reconoce que la posibilidad de emplear la oxitocina como fármaco del amor “abriría una vía de mercado enorme para la utilización de la sustancia por personas sanas, de modo cosmético”.
Determinismo biológico
Juan Lerma, director del Instituto de Neurociencias de Alicante (UMH-CSIC), ve más clara la posibilidad de “modular” aspectos del comportamiento humano. “El amor y otras manifestaciones del comportamiento humano son fruto de la actividad cerebral, y el cerebro funciona a través de sustancias químicas y actividad eléctrica. Si conocemos las bases de la actividad cerebral que determina un comportamiento estamos en condiciones de inducirlo con fármacos o estimulación eléctrica”, explica Lerma. “Todo es químico y eléctrico; podemos llegar a dudar que exista libre albedrío”, remacha.
Hay variantes genéticas asociadas con una mayor tendencia a la monogamia
En humanos, aunque no haya estudios concluyentes sobre la relación entre oxitocina y relaciones amorosas, se ha comprobado que inhalar esta hormona mejora la empatía y aumenta el grado de confianza con otras personas. Un estudio reciente ha concluido también que las variaciones en el gen AVPR1A, responsable de la cantidad de receptores de vasopresina (una hormona relacionada con la oxitocina que estimula la creación de vínculos de pareja) expresada en el cerebro, influye en la tendencia de los hombres a formar parejas estables. Además, las mujeres de los varones con la variante que predispone a la soltería se mostraron menos satisfechas con sus relaciones que aquellas que estaban con hombres sin esa variante.
En la actualidad ya es posible comprar a través de internet productos a base de feromonas y oxitocina que prometen mejorar la vida sexual y amorosa de quienes se los apliquen. La fiabilidad de estos potingues es dudosa, pero ya se están realizando estudios que pondrían el marchamo científico al uso de un spray de oxitocina en el curso de terapias matrimoniales.
Se sea más o menos optimista respecto a la próxima llegada al mercado de una píldora del amor, es necesario recordar que se trataría de un fármaco no necesariamente exento de efectos secundarios. Además, como ha señalado el psiquiatra Antonio Damasio, esta droga no solo tendría aplicaciones románticas. “Algunos podrían preocuparse ante la posibilidad de que los políticos lancen grandes cantidades de oxitocina en los mítines de sus candidatos”, ha apuntado el experto. Una muestra más de que esta droga puede ser una bendición o una maldición, pero será con seguridad un gran negocio.
DANIEL MEDIAVILLA - Madrid - 07/01/2009 21:57

Oxitocina: Hormona de la conducta social?

Existen muchas sustancias químicas que intervienen en la conducta social unas que son demostradas y otras que se encuentran en fase de experimentación, y una de ellas es la Oxitocina, que es una hormona que nos ayuda en el trabajo de parto induciéndolo y distribuyendo la sustancia en la leche materna, la oxitocina no sólo une a la pareja sino que fomenta este lazo entre la madre y el niño, especialmente durante la lactancia.

En nuevos experimentos, los investigadores han descubierto que la hormona es crucial en la habilidad de las personas para reconocer caras.

Los humanos solemos buscar pistas visuales para reconocernos, sin embargo, en los ratones el asunto es distinto pues ellos usan el olfato para saber si otro animal pertenece o no a la familia.

En ese sentido, la hormona es de bastante uso entre los roedores”, explicó en el Diario de Neurociencias, donde fueron publicado los resultados, Peter Klaver, de la Universidad de Zurich y autor principal del experimento.

Los participantes en el estudio recibieron directamente una dosis de oxitocina, vía nasal, para luego resolver ciertas tareas diseñadas por los científicos.

“Ya habíamos visto que la hormona ayuda a crear sentimientos de confianza entre las personas, no sólo entre parejas, donde el lazo es mucho más fuerte, pero también en situaciones sociales comunes.

Sin embargo, todavía no estaba claro su papel en la memoria, principalmente en la memoria social, esa que nos dice si conocemos a alguien y a qué grupo social pertenece”, dijo Klaver.

“No podemos olvidar que el reconocimiento facial es un paso crucial en nuestro éxito en la interacción social entre humanos, si este proceso no funciona nos veríamos en graves problemas”.

El experimento observó por primera vez el efecto directo de la hormona oxitocina en el reconocimiento facial entre humanos.

Los investigadores agregan, además, que el estudio apunta las similitudes que existen entre los humanos y los ratones, específicamente en tareas sociales y de la memoria, por lo que se conoce un poco mejor el sistema que rige la conducta de ambos. “Sabemos que la oxitocina es una hormona que juega un rol crucial en el comportamiento social, este conocimiento avanzaría nuestros estudios sobre el autismo, donde un daño existe que impide una correcta comunicación social.

Muchos de los estudios que se han elaborado en base a la oxitocina han sido realizados por economistas. Ernst Fehr, también de la Universidad de Zurich, fue uno de los pioneros en estos experimentos.

“Cuando el descubrimiento sobre el vínculo de la oxitocina con la confianza fue hecho público, era preciso que otros análisis se realizaran que averiguaran a fondo qué tan confiados podrían ser los humanos bajo los efectos de la hormona, por eso ideamos una seria de experimentos a doble ciego que involucraban dinero. Fueron los primeros en descubrir esta unión directa entre la hormona y la confianza”, dijo Fehr.

Ciertamente, los estudios también explican por qué una mujer se le dificulta más el sexo sin amor, ya que la liberación de la hormona durante el sexo la lleva a confiar, prematuramente, en la pareja.

Hormona contra placebo

Los voluntarios tenían irrigadores nasales; en un grupo las botellas contenían oxitocina mientras que en el otro un placebo. Una vez los participantes inhalaban una dosis del líquido, los investigadores les enseñaban imágenes varias, desde casas hasta rostros de personas.

Al otro día, cuando los voluntarios regresaban, los científicos los esperaban con una prueba sorpresa donde debían recordar, entre más imágenes, las que ya habían visto el día anterior, las que les parecían sumamente familiares pero no recordaban dónde las habían visto y aquellas que conocían bien, incluyendo haberlas recordado del día anterior.

Interesantemente, ambos grupos recordaron los objetos que no tenían connotaciones sociales, sin embargo, el grupo que había recibido la oxitocina recordó mucho mejor los rostros que le habían presentado el día anterior.

La oxitocina hace mucho tiempo que es noticia.

Fuente:
http://www.elcaribecdn.com.do/autor.aspx?AutorID=58&AutorGUID=537A7D90972B40D4811F575BF8FCF8AD&SiteID=2 Según Glenys Alvarez

martes, 6 de enero de 2009

Una 'marihuana sintética' estimula la generación de neuronas

La marihuana no deja de sorprender a los científicos. Pese a tratarse
de una droga ilegal con efectos nocivos probados, sobre todo en las
primeras etapas de la vida, la versión sintética de su principal
principio activo, el tetrahidrocannabinol (THC), sigue mostrando
propiedades beneficiosas en modelos animalesEn concreto, un estudio
presentado el miércoles en Washington, en un encuentro de la Sociedad
de Neurociencia estadounidense, ha confirmado los efectos de los
derivados sintéticos del THC a la hora de retrasar la aparición de la
enfermedad de alzhéimer en ratas mediante la reducción de la
inflamación en el cerebro y la mejora de la memoria. Aunque esto ya
fue descrito en 2005 en otro estudio por la investigadora española
María de Ceballos, del Instituto Cajal del CSIC, el presente trabajo
concluye que la administración de un fármaco sintético basado en las
propiedades del THC, denominado WIN, consigue también estimular la
formación de nuevas neuronas en el hipocampo, la región del cerebro
implicada en el aprendizaje y la memoria.

El fármaco, que no es un extracto de la planta sino un compuesto
sintético, activa en las ratas tres receptores del sistema
cannabinoide (CB1, CB2 y TRPV1), lo que no sólo permite reducir la
inflamación del hipocampo, sino también estimular la neurogénesis.

PREVENIR EL ALZÉIMER
Aunque estos resultados se circunscriben al citado compuesto
sintético, el principal autor del trabajo, Gary Wenk, de la
Universidad Estatal de Ohio, cree que no se puede descartar que la
marihuana, como tal, no pueda servir para prevenir el alzhéimer.
"¿Podría alguien con alzhéimer en su familia prevenir la enfermedad
fumando marihuana? Podría funcionar, pero nosotros no estamos diciendo
eso. Lo que sí sostenemos es que una sustancia legal que imita las
propiedades de la marihuana puede actuar sobre los receptores
cerebrales para prevenir las pérdidas de memoria asociadas a la edad,
lo que es realmente esperanzador", señala Wenk.

En cualquier caso, según señaló el científico a Público, estos efectos
del cannabis se darían mejor en cerebros envejecidos que en cerebros
jóvenes, y siempre hablando de dosis muy bajas. "Esa es la clave, usar
una dosis muy baja, como una calada al día", agrega Wenk, que reconoce
que por el momento no ha sido posible crear un fármaco capaz de
separar los beneficios de la marihuana de sus propiedad psicoactivas.

Para María de Ceballos, "es muy difícil de demostrar" que fumar
marihuana tenga efectos positivos a la hora de prevenir la enfermedad
de alzhéimer.

EL CANNABIS, "MUY PELIGROSO"
Esta investigadora del CSIC cree que, aún en el caso de ue pudiera ser
cierto, no hay que olvidar que el cannabis "es realmente muy peligroso
en la juventud y la adolescencia".

"Estamos en el siglo XXI, y lo que parece razonable es que cuando hay
que tomar un medicamento se tome una pastilla o una inyección, porque
es la forma de saber, bajo control sanitario, la dosis exacta que se
recibe", concluye María de Ceballos.

Fuente:http://groups.google.com/group/fundacionneurociencias